Para desarrollar eficientemente los modelos de plan de acción, un buen content manager (principal responsable de la estrategia de contenido de una organización); debe determinar su público objetivo, que conlleve a implementar sus estrategias de posicionamiento en red, y lo puede conocer mediante la elaboración del buyer persona.
Buyer Persona es una representación de tus clientes ideales. Crearlo te ayuda a visualizar y entender mejor a tus consumidores, y facilita la personalización del contenido de acuerdo a las necesidades, los comportamientos y las inquietudes específicas de diferentes grupos; a lo que se le llama segmentación de marketing, que es dividir un mercado en distintos grupos de compradores que tienen diferentes características y quienes podrían requerir productos o programas de mercadeo separados.
Las Buyer Personas más efectivas se fundamentan en investigaciones de mercado así como en la información obtenida en la base de datos de la organización. De acuerdo al tipo de negocio, puedes tener uno o varios. Es igualmente importante conocer tus Buyer Personas negativas o «excluyentes». Representan a quién no deseas como cliente. Los Buyer Personas se elaboran mediante investigación, encuestas y entrevistas a tu audiencia.
Público objetivo:
El enfoque de las empresas hacia el mercadeo masivo es estrategia del pasado. Alguien expresó: «Practicar el marketing masivo equivale a poner el producto en el mercado, ir a misa el Domingo y rezar para que alguien lo compre». El marketing masivo pretende desarrollar una representación del cliente promedio, lo que es ambiguo. Las nuevas tendencias del mercadeo se refieren cada vez más, a la individualización de los productos y servicios.
Ahora muchas corporaciones intentan vender sus servicios a «mercados de empresas de pequeña dimensión»; para ello contratan una agencia de marketing digital que desarrolle una campaña de mercadeo masivo dirigida a los pequeños negocios, con poco éxito. Resulta más vanguardista dirigirse a un sector o profesión específica y darse a conocer a través de un experto en dicha profesión o industria. Su compañía no permanecerá en ningún mercado donde no pueda ser la mejor.
Cuando vaya a escoger a su público objetivo, recuerde: es más fácil vender a gente con dinero que a gente sin dinero.
Oportunidad:
Cada día se generan nuevos obstáculos y con ellos nuevas necesidades, deseos y oportunidades. Por lo que, podemos centrarnos en mejorar nuestros actuales productos y servicios de muchas maneras.
Una vez determinado su público objetivo, identifique sus problemas: irse de vacaciones a un precio razonable, eliminar el desorden de sus casas y las malas hierbas del jardín, no dormir bien durante la noche, etc. Cada problema puede tener varias soluciones y «es una oportunidad brillantemente disfrazada». Busque las nuevas tendencias. Por ejemplo, puede obtener algunas ideas que incluyen: recogimiento, rejuvenecimiento y cashing out (magnificadas a raíz de la propagación del Covid-19 y la perspectiva actual de valor de las personas). En este momento, los individuos se quedan en casa más tiempo porque el mundo exterior se está volviendo adverso; por lo que puede pensar en maneras de crear un hogar más agradable gracias al mobiliario, la electrónica y otras formas de entretenimiento; a esto se refiere la idea de recogimiento. Rejuvenecimiento: acopia el hecho de que la gente mayor quiere sentirse joven, como consecuencia se genera una amplia difusión de cremas anti arrugas y cirugías estéticas. Cashing out significa que las personas quieren tener una existencia menos atareada, buscando estilos de vida más simples y ciudades menos concurridas.
El éxito sucede cuando la preparación se encuentra con la oportunidad. Una de las grandes oportunidades de hoy en día es generar negocios que puedan poner precios, significativamente más bajos que la competencia, pero manteniendo la rentabilidad.
Competencia:
Todas las empresas tienen competencia. Por ejemplo, en el sector transporte: si solo existiese una aerolínea, ésta tendría que observar los servicios ofrecidos por trenes, autobuses, vehículos, bicicletas, y hasta la satisfacción percibida por los usuarios que prefieran ir caminando a su destino.
Cuanto mayor éxito tiene una compañía, más competencia atrae. Con suerte su empresa atraerá sólo a los buenos competidores, éstos pulen y aumentan las habilidades de la empresa. Los competidores mediocres son molestos. Los malos son un dolor de cabeza para todos los competidores decentes. La clave para obtener ventajas competitivas reside en la habilidad para ser el primero en identificar oportunidades, ser el más rápido, aprender velozmente, y trabajar en la red de cooperación más eficaz.
A corto plazo, los competidores más peligrosos son los que más se parecen a su compañía. Los consumidores no pueden ver diferencias entre las marcas. Su empresa es una más. La clave está en diferenciarse.
“La nueva competencia no se da entre los productos físicos que las empresas producen en sus fábricas, sino entre los valores que añaden a sus ofertas en forma de envase, servicios, publicidad, consejos al cliente, financiación, plazos de entrega, almacenamiento y otras cosas que la gente valora”
Theodore Levitt. Gurú del Marketing
La mejor forma de superar a sus competidores es trabajar duro para que su línea de servicios no se quede obsoleta, antes que sus competidores lo consigan. La más fuerte amenaza es una nueva tecnología. Si es importante vigilar a la competencia, lo es todavía más estar obsesionado por los clientes. Son los clientes y no la competencia quienes, en último término, determinan quién será exitoso.